En este gráfico de los resultados
de las elecciones del 25 de octubre de 1998, se puede observar con total claridad que la
mayor parte de los vascos no son nacionalistas.
Es evidente que el nacionalismo vasco se distingue por ser extraordinariamente visceral. Y esa visceralidad está más que demostrada por sus hechos y sus palabras.
Algunos nacionalistas vascos no dudan en asesinar a las personas que no están de acuerdo con sus ideas, y hay otros a los que se les congestiona el rostro cuando hablan de quienes no piensan como ellos, mientras escupen las palabras con un odio puramente inquisitorial hacia todo lo que no sea su modo de pensar.
Por este motivo es imposible que un nacionalista vasco no vaya a votar, consiguientemente los que no votan no pueden ser nacionalistas vascos; podrán ser cualquier otra cosa, pero no nacionalistas vascos.
En este gráfico se puede ver cómo
ha quedado el nacionalismo vasco después de las elecciones.
El PNV ha subido 40.485 votos desde las elecciones de 1984.
EH (Lo que antes era Herri Batasuna) ha subido 55.976 votos desde las elecciones de 1984.
EA ha subido 2.494 votos desde las elecciones de 1984.
Estas subidas se han notado en casi todos los partidos debido a la superior participación con respecto a las elecciones anteriores.
Los 55.979 votos que han incrementado los resultados de EH parecen demostrar que esa formación política a subido de votos porque ETA (el grupo terrorista cuyos asesinatos no condenan) parece haber decidido dejar de matar; en otras palabras, hay muchos vascos que, aunque son radicales en sus ideas, no estaban de acuerdo con la violencia terrorista y cobarde de ETA.
Los principales partidos de ámbito
estatal y no nacionalistas vascos también han aumentado sus votos, y sobre todo el
Partido Popular.
El PP ha subido 101.922 votos desde las elecciones de 1984.
El PSOE ha subido 42.584 votos desde las elecciones de 1984.
IU ha bajado 22.888 votos desde las elecciones de 1984.
UA ha bajado 12.089 votos desde las elecciones de 1984.
Después de la espectacular subida del PP (la mayor de todas con diferencia), parece evidente que una buena parte de los vascos se identifican con la postura crítica de este partido contra la violencia terrorista de ETA y el nacionalismo excluyente.
También se aprecia que la subida generalizada favorece en 10.574 votos a los partidos no nacionalistas vascos.
Efectivamente en este gráfico de
no nacionalistas también están las personas que no han votado.
Es evidente que los nacionalistas vascos no se quedan en casa cuando hay que votar, ya que la mayor parte del nacionalismo vasco es muy radical (unas veces lo demuestran con hechos y otras con palabras), y por ese motivo creo que no queda más remedio que hacer un nuevo gráfico que contenga a todos esos vascos que no están de acuerdo con ETA ni con el Frente Nacionalista Vasco. Un gráfico que contenga a todos esos vascos que no tienen ningún interés en que Euskadi sea independiente, y a todos esos vascos, en fin, que no se sienten representados por un nacionalismo que sólo alcanza el 37 % de la población de Euskadi... Un 37% que, por supuesto, no es mayoría...
No cabe ninguna duda que el porcentaje de nacionalistas vascos, aunque sea menor, tiene todo el derecho del mundo a manifestar sus ideas y defenderlas en democracia. De todos modos creo que con el resultado de estas elecciones se pone en evidencia que la mayor parte de los vascos no son nacionalistas.
Euskadi (o el País Vasco, o las
provincias Vascongadas, como se prefiera) está compuesto por tres provincias: ÁLAVA,
GUIPÚZCOA y VIZCAYA, y los resultados de estas votaciones por provincias ponen de
manifiesto que las tendencias políticas en cada una de ellas es diferente.
En Álava ha ganado el Partido Popular, en Guipúzcoa ha ganado Euskal Herritarrok y en Vizcaya el Partido Nacionalista Vasco. Igualmente conviene reseñar que el Partido Popular ha sido la segunda fuerza política más votada en Vizcaya.
Vistos estos resultados parece evidente que el nacionalismo vasco no es una idea que predomine entre los vascos con tanta fuerza como los nacionalistas pretenden hacer creer.
El Partido Popular es un partido estatal que no se distingue precisamente por fomentar nacionalismos ni independencias, y sin embargo ha aumentado sus votos en estas elecciones en más de cien mil papeletas con respecto a las anteriores, colocándose como el partido que más ha incrementado sus votos en Euskadi.
Del mismo modo que el éxito del
Partido Popular se ha hecho notar al conseguir ser el partido más votado en la provincia
de Álava y el segundo en Vizcaya; también por capitales de provincia ha sido el claro
triunfador.
En Vitoria, la capital de Álava y sede del Gobierno Vasco, ha ganado el Partido Popular. También en San Sebastián, la capital de Guipúzcoa, ha superado en votos a las demás formaciones políticas, no influyendo para ello en absoluto que en el conjunto de esa provincia haya ganado Euskal Herritarrok.
Como ha quedado perfectamente claro en estas elecciones, no se puede pretender esa exageración de que el pueblo vasco sea independentista, ni que esté oprimido por el Gobierno. Los vascos han hablado y son muchos cientos de miles los que no quieren ningún tipo de autodeterminación ni independencia, y yo me pregunto: ¿Los vascos no nacionalistas podrán disfrutar algún día del derecho a poderse expresar? ¿Los vascos no nacionalistas podrán llegar a decir algún día lo que piensan sin el temor de que un amigo de ETA les tire un cóctel Molotov?.
En este nuevo gráfico se valora la
tendencia -claramente al alza- de los votos no nacionalistas vascos en Euskadi, tomando
como base las cuatro últimas elecciones autonómicas celebradas en el País Vasco y que
abarcan los 12 últimos años.
Sinceramente pienso que estas cifras hablan por sí solas y demuestran con una claridad diáfana que el voto no nacionalista se está fortaleciendo en Euskadi, lo que sin duda significa que las ideas independentistas de un pequeño porcentaje de vascos, generalmente violentos, están siendo contestadas en las urnas con aumentos significativos de votos no nacionalistas o, si se prefiere, "españolistas", que es como los nacionalistas vascos definen a los demás vascos que no piensan como ellos y que, sin duda y aunque ellos no lo quieran así, son mayoría.
Si los nacionalistas vascos lo desean pueden continuar con su discurso del Euskadi oprimido por España, pero las cifras hablan por sí solas; cuanto más nacionalismo salvaje se prentende para el País Vasco, más antinacionalistas vascos van a votar a las urnas.
