DIARIO
LA RAZÓN (10 de enero de 2002)
Arzallus exige al Vaticano obispos vascos
Efe -
Madrid.-
El presidente del PNV, Xabier
Arzallus, exigió al Vaticano que «los pastores vascos sean vascos» y precisó
que «las presiones políticas del Gobierno español han llevado al Vaticano a
introducir obispos que no son del país».
Así se expresa al canal ARD de la televisión pública
alemana que emitirá el próximo domingo un documental sobre «En nombre de
Dios: la iglesia católica y el terrorismo en el País Vasco», que incluye
entrevistas con miembros de la iglesia y líderes políticos. Según un
comunicado de esta cadena, Arzallus afirma que «el nivel jerárquico de la
iglesia ha estado siempre mediatizado y dependiente de la autoridad política
española. Por eso ha existido una esquizofrenia en la iglesia vasca». «Tienes
al obispo de Bilbao y al de Pamplona -añade- que no son vascos, porque las
presiones políticas del Gobierno español han llevado al Vaticano a introducir
obispos que no son del país y que no saben la lengua del país».
Precisa que el Vaticano es un poder espiritual «pero por
tradición se aclimata bastante bien a los poderes reales», añade el
comunicado de la televisión alemana. El líder del nacionalismo vasco afirma
que el PNV y el Gobierno vasco nunca han mantenido buenas relaciones con el
Vaticano y agrega que el Opus Dei «tiene una presencia muy importante y
decisiva en el entorno inmediato del Papa». «Con esta curia vaticana
-manifiesta- y con este Papa hay que ser eslavo para que te atiendan un poco,
porque a los demás nos han dejado absolutamente a un lado y hemos sido
sacrificados a intereses superiores».
Exige al Vaticano que «los pastores vascos sean vascos y no
porque los de otros sitios sean peores, sino que exigimos que sepan la lengua
del país, como pueden exigirles en Ruanda». Tras reconocer que «algunos
obispos, como José María Setién, han trabajado bien», animó a la iglesia a
intervenir en el proceso de paz del País Vasco. «La iglesia -indica- debe
buscar la paz no solo con palabras, sino a través de su influencia».
Recuerda que durante la tregua «hubo movimientos por parte
de la iglesia, que intervino desde la comunidad de San Egidio, habló con ETA y
comenzó una mediación entre ETA y el Gobierno, concretamente con Mayor Oreja».
Para Arzallus, el Vaticano «tiene mucho que hacer en una labor de intermediación,
siempre con la colaboración del Gobierno español, Un Gobierno que se dice católico,
utiliza los medios que utiliza y no quiere entrar en un diálogo para solucionar
el problema», porque «si algún problema de terrorismo se puede solucionar a
través del diálogo es el vasco».