11 de septiembre de 2006 (Angelberto)

ETA se crece y amenaza de muerte a los jueces

Hoy, 11 de septiembre, parece un buen día para hablar de terrorismo, para hablar de ese sistema innoble y mezquino que utilizan los cobardes para conseguir poder sobre los demás.

Y hoy hay que "felicitar" de nuevo a nuestro presidente Zapatero por su extraordinaria habilidad para hacer más fuertes a los terroristas. Hoy hay que felicitar a Zapatero porque gracias a sus "negociaciones" ilegales e ilegítimas con la banda de asesinos, ETA ha conseguido subirse a un pedestal desde donde puede permitirse con total libertad continuar ejerciendo su terrorismo mafioso y sus amenazas.

Antes de que Zapatero y sus incautos seguidores decidieran meterse en las cloacas, era muy raro que los asesinos de ETA se atrevieran a amenazar a un juez, pero desde que el PSOE se ha llenado de mierda estrechando las manos ensangrentadas de los criminales, es raro el juicio en el que los etarras no insulten y amenacen a los jueces y a las víctimas con un sospechoso descaro que antes no existía. Sé muy bien que ni Zapatero ni uno solo de los dirigentes socialistas de su misma calaña de los que se ha sabido rodear, reconocerán sus vergonzosos pactos con los asesinos porque son así de hipócritas, pero lo cierto es que desde que el Gobierno está en tratos con esa gentuza, ETA se ha crecido y se siente más respaldada que nunca para realizar a diario el importante número de actos violentos que viene realizando.

El pasado día 7, el hijo de la gran puta llamado Ignacio Javier Bilbao Goicoechea ha sido juzgado en la Audiencia Nacional por un delito de amenazas contra el juez Garzón, pero antes convendría saber quién es este hijo de puta con cuyos colegas en libertad está negociando Zapatero el modo de entregarles Navarra, regalarles el territorio de las Vascongadas y soltar a todos sus presos a la calle, incluido, por supuesto, este asesino llamado Ignacio Javier Bilbao Goicoechea.

Este asesino hijo de puta y cobarde, fiel representante del nacionalismo vasco de Sabino Arana, el día 21 de marzo de 2002, junto a otro hijo de puta como él, fueron a la localidad guipuzcoana de Orio para realizar una "importante y arriesgada" misión que tenía por objeto "liberar a Euskal Herria". La misión consistía en asesinar por la espalda a un anciano desarmado y sin escolta que tomaba un café en un bar próximo a su casa.

El anciano en cuestión era un concejal socialista de Orio, de 69 años de edad, llamado Juan Priede Pérez. Cuando Juan Priede estaba tomándose ese café, Ignacio Javier Bilbao Goicoechea se acercó a él por la espalda y le disparó un tiro en la nuca. Una vez Juan Priede cayó al suelo le remató disparándole dos tiros más que aseguraron su muerte... Es curioso que en las Vascongadas haya cientos de miles de personas que consideren que el valiente de este episodio es Ignacio Javier Bilbao Goicoechea, y más curioso es aún que los máximos responsables del actual PSOE estén estrechando la mano a los asesinos de Juan Priede y negociando con ellos la entrega de todo aquello por lo que luchó y murió el anciano socialista.

Momento en que Garzón entra a declarar en el juicio contra Ignacio Bilbao por amenazas. La policía tiene que reducir al etarra debido a los insultos y amenazas que profiere contra los jueces.

Pues a este "valiente" llamado Ignacio Javier Bilbao Goicoechea es a quien se juzgaba el pasado día 7, aunque en esta ocasión era por un delito de amenazas de muerte al juez Garzón al que, hace tres años, después de pegar un puñetazo sobre la mesa y arrojarle un calendario a la cara, le dijo: "Vas a acabar como Carrero Blanco".

Pero este sujeto despreciable no sólo ha amenazado a Garzón, porque en fechas posteriores también amenazó al juez Fernando Andreu asegurándole: "Te queda menos que a Melitón Manzanas", e igualmente amenazó después a la jueza Teresa Palacios diciendo: "Fascista, tienes los días contados". Y supongo que un funcionario de prisiones que tuvo la desgracia de estar destinado en la misma prisión donde Ignacio Javier Bilbao cumplía condena, seguramente no podrá olvidar aquellas palabras que el asesino le regaló: "Cualquier día vas a llegar a casa y te vas a encontrar a Blancanieves y a los siente enanitos jugando al fútbol con las calaveras de tu puta familia".

Como puede comprobarse, Ignacio Javier Bilbao Goicoechea es uno de esos individuos de los que abundan entre los nacionalistas vascos, que tratan de demostrar lo valientes que son matando ancianos por la espalda e insultando a jueces y funcionarios en una democracia donde ellos saben muy bien que las represalias contra este tipo de gentuza por parte del poder son impensables.

La cuestión es que Ignacio Javier Bilbao Goicoechea, haciendo gala de lo que de verdad es un nacionalista vasco de ETA, la emprendió de nuevo a insultos y amenazas de muerte, tanto contra Garzón, que declaraba en el juicio, como contra el presidente del tribunal, Alfonso Guevara, al que le dijo: "Te voy a arrancar la piel a tiras" , "te voy a pegar siete tiros", aparte de soltar una serie de insultos que definían a la perfección al que los profería y a toda la basura nacionalista que representa: "Fascista", "borracho", "cerdo", "enano mental", "cabrón", "parásito"... Y, por supuesto, también se dirigió al juez Garzón para decirle: "Pienso cumplir lo que te dije, cabrón. No me olvido de ti, fascista. Estate seguro de que te voy a dar en la cabeza".

Esta es una de las mejores demostraciones de lo que debemos esperar de ETA en particular y del nacionalismo vasco en general. Lo más curioso del caso es que antes de iniciarse este juicio, el fiscal Jesús Santos pedía 12 años por las serias amenazas de muerte del asesino Ignacio Javier Bilbao Goicoechea al juez Garzón, y después del espectáculo que dio el criminal, ¿qué hizo el fiscal Jesús Santos? ¿Aumentar la petición de pena? Pues no. El fiscal Jesús Santos, después de las nuevas amenazas de muerte e insultos contra el presidente del tribunal y contra Garzón, redujo la petición de condena a dos años. De doce que pedía antes del juicio a dos que pidió cuando finalizó. ¿Alguien lo entiende? Pues yo no.

ETA continúa con el terrorismo callejero y las autoridades dan permiso a los terroristas para salir a la calle en manifestación

Imágenes de los últimos atentados de ETA. En esta ocasión también han atacado una sede del PSOE. Como "premio" a la desfachatez de los etarras, las autoridades les permiten realizar manifestaciones a favor de la banda terrorista.

Y también es incomprensible, al menos para mí, que nuestro presidente Zapatero siga empecinado en la "negociación" con los asesinos. Porque ETA, aparte de seguir extorsionando y aparte de seguir amenazando, también sigue cometiendo numerosos atentados terroristas en los que, eso sí, ha cambiado los explosivos clásicos por artefactos incendiarios, aunque es evidente que, finalmente, todos ellos son bombas y siempre acaban produciendo un daño muy similar.

Los últimos atentados los han realizado durante el fin de semana. Uno de ellos fue el ocurrido sobre las ocho y media de la tarde del día 9, cuando un grupo de nacionalistas vascos de ETA encapuchados lanzaron varios artefactos incendiarios contra un autobús urbano en la calle Cristóbal Balenciaga, de San Sebastián, en el momento en que el vehículo se dirigía a Monte Igueldo. Por suerte el conductor del autobús consiguió huir con el vehículo sin que sufriera especiales daños.

Al día siguiente, durante la madrugada del domingo día 10, ETA atacó la sede del PSOE del barrio de Inchaurrondo, de San Sebastián, probablemente para dar un toque de atención a Zapatero, con el fin de que no olvide que lo prometido es deuda. Y a las cuatro menos cuarto de la tarde, en pleno Boulevard de San Sebastián, los terroristas lograron -esta vez sí- quemar totalmente un autobús urbano, supongo que para que Euskal Herria sea un poco más libre.

Y para ejecutar estas acciones de violencia, a los terroristas "no les ha quedado más remedio" que dar varios golpes con una barra de hierro a un anciano que les recriminó que quemasen el autobús. A consecuencia de los golpes, el anciano resultó herido con diversas fracturas.

Y todo esto es lo que ha dado de sí el fin de semana. Primero un asesino de ETA insulta y amenaza gravísimamente a dos magistrados y el fiscal le premia rebajándole exageradamente la petición de condena, después los etarras cometen varios atentados contra autobuses hiriendo a un anciano y queman una sede del PSOE, y como premio a ETA, las autoridades dan permiso para que se celebre una manifestación de hijos de puta en la Parte Vieja de San Sebastián, que salieron a la calle para exigir que se ponga en libertad a los criminales de ETA encarcelados, entre los que se encuentra Ignacio Javier Bilbao Goicoechea.

Y Zapatero, tan pancho... Despreciando a media España en su negociación ilegal con los asesinos de ETA, dando el parabién a los independentismos periféricos y fascistas de España, volcándose por un lado con dictaduras bananeras y por otro con dictaduras islamistas, y desvinculándose cada día un poco más del mundo occidental.

Primero fue Franco el que nos alejó de occidente y ahora es Zapatero el que nos aleja cada día más... La balanza se equilibra.

Hay que reconocer que los españoles somos, como poco, peculiares. Ya no sabe uno si reírse o llorar.

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