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12 de noviembre de 2007 (Angelberto)

ETA pone dos bombas, una de ellas trampa, en los Juzgados de Guecho

Edificio de los Juzgados de Guecho donde ETA puso las dos bombas. En la foto de abajo puede apreciarse la papelera donde ETA escondió la bomba trampa.

Sobre las seis y cuarto de la mañana de ayer, día 11, un miembro de ETA hizo una llamada desde una cabina telefónica de la localidad de Berango (Vizcaya), para avisar al servicio de emergencias 112 de que habían colocado una bomba en una mochila en los Juzgados de Guecho, localidad próxima a Bilbao y situada en la margen derecha del Nervión. Los terroristas de ETA también advirtieron que la bomba estallaría media hora después del aviso.

De inmediato se presentaron la Ertzaintza y la Guardia Civil para acordonar la zona y evitar daños personales, localizando junto al Juzgado la mochila con la bomba.

Tras esperar el tiempo indicado por los terroristas y comprobar que no explosionaba, en torno a las nueve de la mañana los equipos especialistas en explosivos procedieron a su desactivación, comprobando que no había explotado debido a un fallo en el sistema de ignición. Una vez desactivada la bomba se comprobó que estaba compuesta por cinco kilogramos de cloratita con la correspondiente metralla que, de haber hecho explosión, habría causado importantes daños materiales.

Después de considerar que el peligro había pasado, la Ertzaintza estuvo haciendo su trabajo de recogida de huellas y otros indicios en torno al Juzgado durante el resto de la mañana, hasta que, sobre las dos de la tarde, la visualización de las grabaciones de las cámaras de seguridad que hay instaladas en torno al edificio público, indicaron que la mochila-bomba fue colocada allí por dos individuos, los cuales, antes de marcharse, introdujeron algo en una papelera situada justo frente a la puerta principal del Juzgado.

Inmediatamente los especialistas en explosivos se trasladaron de nuevo al edificio de los Juzgados de Guecho para hacer un reconocimiento del contenido de la papelera, hallando en su interior un paquete que resultó sospechoso.

La bomba trampa

Las Fuerzas de Seguridad estuvieron en la zona de los Juzgados de Guecho durante toda la mañana.

Con la ayuda de un robot de desactivación de explosivos, la Ertzaintza descubrió que en el interior del paquete había otra bomba, en esta ocasión conteniendo tres kilogramos de cloratita y abundante metralla, a cuya bomba no hicieron mención alguna los terroristas de ETA cuando avisaron telefónicamente al 112, con el fin de que la explosión de esta segunda bomba pillase desprevenidos a los ertzainas que recogían las pruebas.

El sistema de la bomba trampa ya ha sido utilizado por los nacionalistas de ETA en numerosas ocasiones para causar la mayor cantidad de muertos posible entre los policías que están trabajando con la primera bomba o recogiendo pruebas, y ésta era la intención de ETA también esta vez, que es evidente que habría logrado su objetivo de no ser porque el detonador de esta segunda bomba también falló.

Dos ertzainas se aproximan a la papelera donde ETA había ocultado la bomba trampa.

Sin duda alguna todos tenemos que agradecer que los pobres desgraciados que integran ETA sean unos auténticos incompetentes, porque de haber sido medianamente -sólo medianamente- hábiles, es evidente que habrían logrado provocar la masacre que pretendían.

Estos idiotas descerebrados y extraordinariamente incultos, para demostrar lo valientes que son, hace un mes se escondieron en la noche para poner una bomba en el coche de un escolta de Bilbao con el indudable fin de asesinarle, pero, claro, al ser tan inútiles, sólo consiguieron hacerle unas heridas sin demasiada importancia de las que, por suerte, se ha recuperado perfectamente.

Y ahora, en un claro intento de resarcirse del fracaso del último atentado, los subnormales han pensado que con esta bomba trampa se llevarían por delante a dos o tres policías vascos, pero mira por dónde resulta que a estos bobos les fallan los detonadores... Vamos, que los retrasados éstos de ETA deben tener ahora mismo en su organización un elenco de ineptos e incapaces tan magnífico que me están empezando a decepcionar. Siempre se ha dicho que por el coraje y la inteligencia de tu enemigo se mide tu calidad y nobleza, y si eso es cierto, la verdad es que los demócratas estamos empezando a tener motivos para preocuparnos...

Dos ertzainas heridos

Secuencia fotográfica del descubrimiento de la bomba trampa. Arriba a la izquierda, las cámaras que grabaron el momento en que el terrorista escondía la segunda bomba en la papelera.

A pesar de la incapacidad de ETA como terroristas serios, en cierto modo la suerte ha estado de parte de ellos, porque durante los posteriores trabajos de análisis y estudio de los sistemas de activación de las bombas etarras, uno de los detonadores explosionó de forma accidental ocasionando diversas heridas a los dos ertzainas que manipulaban las bombas.

Uno de los ertzainas resultó herido leve y el otro perdió cuatro dedos de una mano, aunque finalmente han podido reimplantarle tres de ellos en el hospital de Cruces.

Nuevamente ETA ha fallado y no se ha salido con la suya, que era causar el máximo daño posible a la Ertzaintza matando a varios de sus miembros, y aunque está bastante claro que los etarras, como terroristas, son indiscutiblemente ineptos, hay que reconocer que no hace falta ser muy competente para apretar el gatillo de una pistola mientras se apunta a la nuca de una persona indefensa, ni hace falta estar en posesión de una inteligencia excepcional para hacer explotar una bomba, y por eso debemos prepararnos para próximos atentados que, sin lugar a dudas, traerán nuevos muertos, nuevas viudas y nuevos huérfanos.

Pero así entiende ETA la democracia: Amenazar, extorsionar y asesinar para conseguir objetivos políticos en un estado de derecho.