La madrugada de ayer, día 8 de junio, en torno a las 3,00, una bomba compuesta por unos cinco kilos de amonal y metralla ha hecho explosión en las instalaciones que el diario vasco "El Correo" tiene en el polígono Torre Larragoiti de la localidad de Zamudio (Vizcaya).

En el momento del atentado había unas 50 personas trabajando en las rotativas, a cuyos operarios les sorprendió la deflagración en su puesto de trabajo, ya que en esta ocasión -como en el último atentado contra la Guardia Civil de Legutiano- ETA ha preferido no avisar, probablemente para que hubiera daños personales. De todos modos a la banda terrorista no le han salido demasiado bien las cosas, ya que esta vez no ha habido ningún herido.

Los asesinos llevaban la bomba preparada para activarse mediante un temporizador, oculta en el interior de una mochila que dejaron en la parte posterior del edificio, causando importantes daños en la fachada y el tejado. Con esta nueva salvajada los terroristas han pretendido dar un toque de atención a los medios de comunicación para que se dobleguen a sus deseos y les ayuden con su propaganda nacionalista en vez de cumplir con su obligación y decir la verdad. No es la primera vez que ETA atenta contra la libertad de expresión de los medios de comunicación vascos, concretamente el día 24 de mayo de 2001 esta misma organización terrorista asesinó al director de El Diario Vasco, Santiago Oleaga Elejabarrieta.

Aparte de los daños sufridos por El Correo en este atentado, también otras empresas del polígono industrial han resultado afectadas por la explosión, como siempre ocurre en todos los atentados de ETA.

En primer lugar ETA busca sus víctimas entre la sociedad, las cuales siempre suelen ser personas o entidades que se niegan a aceptar la tutela del nacionalismo vasco radical que lideran los terroristas, y después, del modo más cobarde posible, tratan de causar el máximo dolor a esas víctimas, no reparando nunca en los "daños colaterales" que siempre se producen en los atentados con bombas, cuyos atentados, curiosamente, son los preferidos del mundo de ETA.

La banda terrorista tiene unos propósitos muy claros -y minoritarios en el pueblo vasco- a los que nunca, en ninguna negociación, ha querido renunciar, y todos aquéllos que de algún modo traten de poner impedimentos a dichos propósitos o incluso se limiten únicamente a criticar los métodos de ETA para conseguirlos, automáticamente se convierten en objetivos de la organización terrorista y pasan a engrosar su lista negra para futuros atentados.

Concentraciones contra este atentado que ataca la libertad de información

Pero a pesar de todos los violentos intentos por parte de ETA para tratar de controlar al pueblo vasco, a los representantes políticos y a los medios de comunicación, lo cierto es que esta organización terrorista cada vez tiene menos apoyos y mucha más gente en su contra, lo cual es perfectamente lógico porque, a pesar de todo, el pueblo vasco es, como todos los pueblos, un pueblo noble que no acepta la sumisión a la ideología racista y totalitaria que propagó Sabino Arana.

Hoy, día 9, integrantes de la Asociación de Periodistas Vascos y distintos miembros de medios de comunicación de Euskadi, se han concentrado frente al Teatro Arriaga, de Bilbao, para protestar por este nuevo atentado de ETA contra la libertad de expresión. Después de la concentración, la presidenta de la asociación, Lucía Odriozola, ha asegurado: "Bajo ningún concepto cederemos al chantaje y la coacción de las bombas. Los medios de comunicación seguiremos trabajando en defensa del derecho a la vida, el derecho a la libertad, sin censura ni sometimientos a presión alguna". Por otra parte, el director del diario El Correo, Juan Carlos Martínez, ha manifestado que en el periódico se sigue trabajando con total normalidad a pesar de los daños y desperfectos causados por la bomba etarra.

También el ayuntamiento de Zamudio, por unanimidad de todos sus concejales, se ha sumado a las condenas de todos, y en un comunicado público se ha manifestado, en referencia a ETA,  que "no se tolerará que intenten acallar a la sociedad vasca" y que "la organización terrorista ETA una vez más ha demostrado que es incapaz de entender que Euskadi es un pueblo plural, donde cabe la libertad de pensamiento, de opinión y de información".

Es evidente que ETA continuará con sus absurdos atentados que a nada conducen, y eso pondrá de manifiesto, cada día un poco más, su locura, una locura que poco a poco les está distanciando de la gran mayoría de vascos que lo único que quieren es vivir tranquilos, felices y en libertad.

Sinceramente creo que nadie ha hecho más en contra el nacionalismo vasco que la organización terrorista ETA y, paradójicamente, el propio Sabino Arana.

En fin...