LOS ASESINOS DE ETA SÓLO REPRESENTAN AL 8 % DE LOS VASCOS O AL 0'4 % DEL TOTAL DE LOS ESPAÑOLES

 

JUICIO Y RISAS POR EL ASESINATO DE FERNANDO BUESA Y SU ESCOLTA

 

Fernando Buesa Blanco era un vasco de Bilbao, abogado y dedicado a la política desde la llegada de la democracia. Su máximo interés como socialista fue la justicia social y avanzar lo máximo posible en la democracia.

Fue concejal del ayuntamiento de Vitoria y Diputado General de Álava. En su relación con los políticos que no compartían sus mismas ideas era educado y amigo del diálogo para solucionar conflictos y diferencias. Lógicamente criticaba a ETA por asesinar.

Estaba casado, tenía tres hijos y hacía una vida muy familiar.

El día 22 de febrero del año 2000 los nacionalistas vascos de ETA -para evitar que pudiera seguir dando sus argumentos en el Parlamento- lo asesinaron haciendo explosionar un coche bomba cuando se dirigía a su trabajo junto a su escolta Jorge Díez que también murió en la explosión.

Durante las honras fúnebres los principales líderes nacionalistas vascos fueron los únicos que no se acercaron a la familia para mostrarles su apoyo y condolencias.

Casi dos años y medio más tarde, el 13/06/02, sus asesinos, los nacionalistas de ETA Luis Mariñelarena Garciandía y Asier Carrera Arenzana fueron juzgados, y durante el juicio despreciaron la memoria de Fernando Buesa y se rieron de sus familiares mientras hacían gestos de complicidad con los batasunos que, entre risas y cachondeo, habían ido al juicio para prestar apoyo a los asesinos. Finalmente los asesinos fueron expulsados de la sala, entre otras cosas por la despreciable y amenazante falta de respeto que estos nacionalistas vascos siempre muestran hacia vivos, muertos y amenazados.

Estas acciones execrables es lo que los obispos vascos parecen defender al criticar la ilegalización de Batasuna que apoya el 95 % del Parlamento.

 

Instantes después de que los asesinos hiciesen explosionar el coche bomba cuando Fernando Buesa y su escolta Jorge Díez pasaban junto a él. En el suelo, tapado con una sábana, uno de los cuerpos.

 

Luis Mariñelarena Garciandía y Asier Carrera Arenzana, en el habitáculo acristalado de la sala donde eran juzgados, mostrando su chulería a los familiares de Fernando Buesa, de cuyo asesinato -según ellos- se sienten orgullosos.

 

Cuando llegan los servicios de atención médica lo único que pueden hacer es certificar las muertes porque los cuerpos de Fernando y de Jorge están destrozados.

¡Otra gran hazaña del nacionalismo vasco!.

 

Luis Mariñelarena Garciandía y Asier Carrera Arenzana, desde el banquillo de los acusados se ríen de los familiares de los asesinados con la tranquilidad que les da el saber que España es un estado democrático de derecho y que por muy asesinos que sean y por mucho que desprecien y se rían de los muertos y de los familiares, continuarán disfrutando de las democráticas cárceles españolas con el mismo buen aspecto que ahora tienen.

 

Los familiares y amigos de los asesinados que están viendo el juicio se ven obligados a sufrir las ofensas, las risas y los desprecios de los etarras y sus cómplices.

Los nacionalistas vascos de ETA no se conforman con asesinar a los que no piensan como ellos sino que, además, tratan de hacer el mayor daño posible a los familiares de las víctimas profanando sus tumbas (ya lo han hecho en varias ocasiones) y riéndose del natural dolor que los padres, esposas, hijos y amigos puedan sentir por haber perdido a un ser querido de un modo tan injusto y brutal.

Así es ETA y así es el nacionalismo vasco que representa junto a Sabino Arana. 

 

PULSE AQUÍ PARA VOLVER A "FOTOS DEL HORROR"

 

Nacis.jpg (54217 bytes)


http://www.interbook.net/personal/angelberto/

angelberto@interbook.net

Encabezado.gif (5899 bytes)