Movilizaciones por el asesinato del concejal socialista de Lasarte, Froilán Elespe Inciarte

Como siempre viene sucediendo, el pueblo se movilizó tras el asesinato de este concejal socialista por los nacionalistas vascos de ETA. Los vecinos de Lasarte salieron a la calle para negar absolutamente a ETA pero, por primera vez, también salieron para negar a sus cómplices.

Los cómplices de ETA -como todo el mundo sabe- son los miserables de Euskal Herritarrok y toda esa gentuza que les vota (delincuentes, malos estudiantes, desarraigados, locos, ladrones, tontos y violentos), pero que el resto de los nacionalistas no se crean que se escapan a esa correcta definición de "cómplices" porque estoy plenamente convencido de que la inmensa mayoría de españoles también les consideramos cómplices a ellos de buena parte de los desmanes fascistas de sus socios de Lizarra. Quizá por ese motivo protestó el Presidente del PNV de Guipúzcoa, Juan María Juaristi, a quien no le pareció bien que en la pancarta se dijese tan explícitamente que se estaba en contra de los cómplices de los asesinos... Y yo me pregunto: ¿en algún rincón de su subconsciente se sentiría cómplice el señor Juaristi de la sangre derramada en nombre del nacionalismo vasco?. No lo sé, pero es probable que sí. ¡Ah!, por cierto, Arzallus, el Presidente del PNV, lógicamente no asistió a la manifestación.

En esta ocasión los vascos se han indignado de un modo parecido a como se indignaron cuando los nacionalistas de ETA asesinaron al concejal del Partido Popular

Después de aprobar la moción de condena y firmarla, los nacionalistas vascos de Euskal Herritarrok -esos miserables cobardes y fascistas- se negaron a firmar la condena y a cambio leyeron un comunicado, mal chapurreado en euskera, en el que justificaban que sus compañeros de ETA hubiesen asesinado al concejal Froilán.

La gente presente en el pleno no quería dejarles leer su comunicado fascista pero la alcaldesa socialista Ana María Urchuegia Asensio les recordó que nuestra democracia permite utilizar la palabra a todos, sin exclusión alguna, y los fascistas pudieron babear a gusto lo que los etarras les habían escrito previamente, aunque durante la lectura de la soflama todos los asistentes -con muy buen criterio- les dieron la espalda (por no decir el culo).

Tras la aberrante lectura de la justificación del asesinato de un concejal demócrata, Ana Urchuegia, la alcaldesa de Lasarte, no pudo evitar dirigirse a ellos para llamarles sinvergüenzas a la cara, y los tres perros (que me perdonen los perros) la oyeron sin escucharla y probablemente pensando: "A que la próxima eres tú".

Y exactamente lo mismo les ocurrió a todos los que allí se encontraban. No pudieron reprimir gritarles y definirles (que no insultarles) llamándoles lo que sin duda son: "Euskonazis de mierda" "Putos chivatos" "Fascistas de HB" "Asesinos"... Pero los compañeros del cobarde etarra que mató a Froilán, ni se inmutaban mientras probablemente pensaban: "A que volamos medio pueblo".

Hubo un momento en que la alcaldesa temió que la gente acabase por linchar a los perros (que me vuelvan a perdonar los perros), pero los demócratas no son como ellos y los fascistas se pudieron ir tranquilamente a su casa para celebrar el asesinato y para informar a sus compañeros de las pistolas de lo ocurrido en el pleno y darles las identidades de los vascos no nacionalistas que se atrevieron a manifestarse contra ellos.

Una de las personas que había en el Ayuntamiento les puso una pistola encima de la mesa (pintada en un folio, por supuesto y por si acaso) y les dijo que sin pistolas no eran nada. No sé lo que los cobardes fascistas pensarían en ese momento pero es muy probable en algún oscuro rincón de sus mentes enfermas reconociesen que, en efecto, sin pistolas sólo son pobres desgraciados y precisamente por eso las usan. Complejo de inferioridad, diría yo.

La fascista Aiora Zulaika, tan modosita ella, con su pelito corto estilo ursulina y de profesión payasa, junto a sus dos compañeros de sangre (uno de los cuales, por cierto, hizo la mili con Froilán), aguantaron impertérritos la indignación de la gente, y es que todos estos fascistas de mierda saben perfectamente que de los demócratas nada malo se puede temer, y mientras tanto probablemente pensaban: "Nosotros moriremos de viejos pero algunos de vosotros moriréis a tiros".

Y ésa es la diferencia entre nacionalistas vascos y vascos no nacionalistas, que los nacionalistas vascos (Arzallus, Juaristi, Imaz, Ibarretxe, etc., etc...) morirán en su cama, de viejos y muy tranquilamente, mientras que los no nacionalistas no saben dónde les espera la bala traidora o la bomba maldita. Y es que eso es lo bueno que tiene hacer pactos con los asesinos: Nosotros no hacemos nada contra vosotros y vosotros no nos matáis. Vale, firma aquí. Pacto de Lizarra.

Y, efectivamente, la fascista Aiora Zulaika es de profesión payasa y forma un trío llamado "Txakolo, Pirritx eta Porrotx" con otras dos personas afines a su ideología fascista. Estos tres seres infames se dedican a "divertir" a los niños entre asesinato y asesinato de sus compañeros de ETA, y a pasar la información que sus pistoleros necesitan para ir eliminando poco a poco a los que no piensan como ellos.

Me imagino que si las cosas siguen así, algunos de los niños a los que esta fascista ahora divierte, serán asesinados cuando se hagan mayores, si es que se atreven a no ser nacionalistas vascos, y muy probablemente sea la propia Aiora la que se encargue de decirle a ETA el momento más adecuado para descerrajar dos tiros en la cabeza a la persona en cuestión...

Maldito sea quien vuelva a contratar a esta gentuza para divertir a niños inocentes.

La otra cara de la moneda es la alcaldesa de Lasarte, Ana Urchuegia. Esta mujer ha demostrado ser una demócrata de pies a cabeza, pero sobre todo una mujer valiente y admirable. Es demócrata porque así lo ha venido demostrando desde siempre y así lo ha demostrado ahora también enfrentándose a la gente que pretendía no dejar hablar a los fascistas en el Ayuntamiento. Y es valiente y admirable porque también se ha atrevido a enfrentarse a los violentos y a reprocharles a la cara su indignidad, incluso sabiendo que sus palabras pueden significar que cualquier día sea asesinada como lo ha sido su compañero Froilán.

Tras la manifestación, la alcadesa exigió al penoso Gobierno Vasco de los nacionalistas "un compromiso más activo y militante por la vida", y también hizo referencia al tan manido "diálogo" diciendo: "El diálogo con ETA conduce a hacer concesiones al fascismo en la claudicación de nuestra libertad". Y en referencia a Ibarretxe y a la tibieza del gobierno nacionalista del PNV para perseguir a los terroristas también dijo: "Quienes vivimos en el corredor de la muerte queremos algo más que palabras de condena después de cada asesinato".

Y finalmente pidió a todos los representantes públicos del Estado de Derecho "que actúen con toda contundencia y eficacia", y tuvo un último y cariñoso recuerdo para las víctimas del terrorismo, manifestando que "hoy más que nunca Euskadi necesita una rebelión democrática".

Mi más profundo respeto por esta alcaldesa auténtica y valerosa.

Y mientras el Presidente del Partido Nacionalista Vasco en el poder, Xabier Arzallus, cenaba tranquilamente en casa, los ciudadanos vascos recorrieron las calles de varias localidades de Euskadi pidiendo esa paz que tanto necesitamos y lanzando un desgarrador grito contra los asesinatos cometidos en nombre del nacionalismo vasco, esos asesinatos a los que tan acostumbrados nos tienen los socios de Arzallus.

Toda esa gente de paz, todos esos vascos que ya están hartos de tanta indignidad nacionalista, salieron a la calle para decirle a ETA y a sus cómplices que dejen de matar, y para decirle al Partido Nacionalista Vasco que apliquen la ley contra los terroristas en vez de prohibir a la Ertzaintza que actúe como deberían hacerlo profesionales que cobran más de trescientas mil pesetas al mes de los contribuyentes.

Pero Arzallus siguió cenando muy tranquilamente en su casita, con la foto de su maestro e inspirador Sabino Arana en la cabecera de su cama... mientras sus monigotes protestaban porque en la pancarta de la manifestación ponía: "COMPLICES TAMPOCO".

¡Vaya jeta tienen!. Es para llorar...

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