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29 de marzo de 2006 (Angelberto) |
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Movimientos tras la tregua de ETA
Dentro de un optimismo general, algo más que moderado, se han empezado a ver ciertos curiosos movimientos que en mi opinión podrían ser dignos de algún análisis. El primero de ellos ha sido el acercamiento entre el PP y el PSOE para formar una especie de frente común en las negociaciones con ETA que, según todos los indicios, ya no son especulaciones sino una realidad. Parecen quedar ya muy lejos aquellas "acusaciones" que el PP le hacía al PSOE diciendo que estaba negociando con ETA a espaldas de los españoles, lo cual los miembros del PSOE negaban en todas y cada una de las ocasiones en que se les preguntaba sobre el tema. Ahora se ha descubierto que el PP tenía razón y que el PSOE faltaba a la verdad. Ahora se ha sabido que el PSOE inició sus contactos con ETA hace cuatro años, es decir, dos años antes de que el PSOE ganase las elecciones con la "ayuda circunstancial" del atentado del 11-M. La cuestión es que, a día de hoy, el PP y el PSOE parecen haber adquirido el compromiso de ir juntos en esta aventura, probablemente flexibilizando el PP un poco su postura, y prometiendo el PSOE que no volverá a mentir y que le contará al PP todas las circunstancias y condiciones que se vayan dando a lo largo del proceso. Esperemos que todo esto acabe en idilio, pero no sé por qué me da la impresión de que no vamos a tener tanta suerte. La curiosa respuesta del Estado
Ante la tregua de ETA el Gobierno ha querido mostrarse complaciente con los terroristas, pero al mismo tiempo también ha querido decirle a la sociedad que en España se cumplen las leyes, y ha habido una especie de toma y daca con el asunto del Juez Grande Marlaska, los fiscales y el encausado Otegui, que finalmente ha terminado con los huesos del reo en la cárcel, aunque, eso sí, podrá salir si entrega una fianza de 250.000 euros. Batasuna se ha tomado este encarcelamiento como una afrenta a sus "buenas intenciones", y, en mi opinión, tanto el "toma y daca" como la "afrenta", no dejan de ser una puesta en escena para que las bases (o la morralla, como diríamos en mi pueblo), no acaben mosqueándose con sus dirigentes. Supongo que en muy poco tiempo (no me atrevo ni siquiera a decir días), el cuarto de millón de euros será depositado en el juzgado por no se sabe quién, y Otegui saldrá de nuevo de la cárcel con una sonrisa en los labios y apretando el puño izquierdo, entre los vítores y las ikurriñas de unos pocos simpatizantes de terroristas que le estarán esperando para que les saquen en la tele. No sé si realmente todo esto será una puesta en escena o que ETA está de verdad derrotada, pero lo cierto es que las cosas que están ocurriendo últimamente no dejan de despertar mi curiosidad y sorpresa. La también curiosa respuesta del PNV Otra curiosidad a tener en cuenta ha sido la actuación de la Ertzaintza a los pocos días de la declaración de la tregua, y esto sí que ha sido curioso.
Como todo el mundo sabe, la Ertzaintza es la policía política del PNV, es decir, se trata de un cuerpo policial que no se rige por el Código Penal o la Ley de Enjuiciamiento Criminal, sino que, principalmente, se limita a seguir las órdenes de los políticos que mandan en el País Vasco. La Ertzaintza es una policía preparada y con una inmensa información sobre ETA y su mundo, y sin embargo es rarísimo que realicen detenciones de terroristas porque al parecer lo tienen expresamente prohibido, salvo que se les ordene desde muy arriba. Pues bien, a pesar de eso (y a pesar de la tregua), la Ertzaintza ha detenido el pasado día 28 a dos de los etarras que el día 14/09/03 atentaron contra una patrulla de su mismo Cuerpo. Los detenidos han sido Luis Samuel Damborenea y Dani Yaniz. ¿Qué motivos ha podido tener el PNV para ordenar la detención de dos etarras, precisamente seis días después de la tregua? ¿Qué se pretende comunicar con este modo de actuar? ¿Por qué ha esperado el PNV a este momento para que su policía haga estas detenciones? Lo que yo decía: Curiosidades. En fin, esperemos que todo esto tenga algún significado y que el resultado final sea el que la inmensa mayoría de los españoles esperamos. Ojalá no nos engañen.
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