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26 de marzo de 2007 (Angelberto)

Los nacionalistas vascos del PNV agreden a un miembro del Foro de Ermua para apoyar a Ibarretxe

El etarra Otegui (a la izquierda), y su colega "sabiniano", Ibarretxe (a la derecha), felices cuando van a declarar al Juzgado por delitos relacionados con el terrorismo, mientras un miembro del Foro de Ermua (en el centro) se retuerce de dolor tras la agresión de un nacionalista vasco.

Hoy, día 26 de marzo, nuevamente han tenido que ir a declarar los nacionalistas vascos Arnaldo Otegui (ETA) y Juan José Ibarretxe (PNV), en relación con delitos vinculados al terrorismo. La otra vez fue el día 31 de enero pasado.

Como todos en España sabemos muy bien -y él mismo así lo reconoce-, Ibarretxe, Presidente del Gobierno Vasco, ha infringido la ley en numerosas ocasiones al reunirse con los asesinos para realizar tratos secretos que sólo ellos conocen, y además ha asegurado que seguirá infringiendo la ley para "lograr la paz", es decir, Ibarretxe es uno de esos individuos convencidos de que las leyes democráticas sólo hay que cumplirlas cuando cada cual lo considere oportuno, según convenga a sus particulares intereses.

Estos dos nacionalistas vascos que de nuevo han declarado como imputados ante el juez, son los que representan al terrorismo comunista de ETA (Otegui), y al fascismo nacionalista vasco de Sabino Arana (Ibarretxe), y ambos mantienen una clara alianza contra la ley y el estado de derecho, y contra la mayoría de los españoles.

Desde antes de iniciarse las declaraciones en el Juzgado, los interesados reunieron a sus correspondientes grupos de gentuza, por un lado los comunistas de ETA y por otro los fascistas del PNV, para insultar al Presidente del Alto Tribunal Vasco, Fernando Ruiz Piñeiro, y para ultrajar y agredir a los siete miembros del Foro de Ermua que se acercaron al Juzgado para ejercer la acusación de su previa denuncia contra Otegui e Ibarretxe. Igualmente los comunistas y fascistas vascos se reunieron allí -cómo no- para aclamar, vociferantes, a sus despreciables líderes.

Secuencia fotográfica de la agresión. El agresor fue retenido por los escoltas pero la Ertzaintza permitió que se fuese sin siquiera identificarle, ¿por qué?

Cuando los siete miembros del Foro de Ermua (todos ellos vascos) trataban de entrar en el Juzgado, un numeroso grupo de fascistas del Partido Nacionalista Vasco les increparon por denunciar a su jefe y al etarra Otegui, y entre los zarandeos y empujones, un hijo de puta del PNV, de los que apoyaban a Ibarretxe, le dio una fuerte patada en la entrepierna (en los huevos, para que nos entendamos) a Antonio Aguirre, socialista y miembro de la directiva del Foro de Ermua, el cual cayó fulminado por el dolor.

Mientras Antonio Aguirre se retorcía en el suelo, la gentuza del PNV se reía al mismo tiempo que gritaban: "¡Que se muera, que se muera!" "¡Que les pongan una bomba!" Y que conste que no me he equivocado cuando he dicho "la gentuza del PNV", porque los que querían que Antonio Aguirre se muriese, y que pusiesen bombas a los miembros del Foro de Ermua, no eran los comunistas de ETA sino los fascistas del Partido Nacionalista Vasco de Sabino Arana y de Juan José Ibarretxe... Como todos podemos comprobar, el PNV y ETA se están aproximando tanto, que dentro de poco va a ser difícil distinguir a unos de otros.

A todo esto, el agresor echó a correr protegido por los amigos de Ibarretxe, pero fue rápidamente interceptado por los escoltas -que los que no son nacionalistas siempre tienen que llevar en el País Vasco-, y a continuación se lo entregaron a los ertzainas. Una vez entregado a la policía vasca, lo que cualquiera podría esperar es que le identificasen, le detuviesen y le llevasen a la comisaría, pero, increíblemente, no sucedió ninguna de esas tres cosas. La Ertzaintza se limitó a soltarle y permitir que huyese corriendo del lugar sin tener de idea de su identidad, por lo que Antonio Aguirre, el agredido, no podrá ejercer acciones legales contra él, a no ser que los medios de comunicación colaboren para identificar plenamente al hijo de la gran puta del PNV que le atacó. ¿Qué les parece nuestro "estado de derecho"?

Fascistas del PNV y comunistas etarras (arriba) y, los miembros del Foro de Ermua (abajo)

A consecuencia de todo lo ocurrido ha habido bastante gente en España que se ha escandalizado, pero lo cierto es que no hay motivo alguno para escandalizarse. Que los nacionalistas vascos actúen de modos violentos es muy normal, porque, al fin y al cabo, ésa ha sido siempre su razón de ser y existir, y gracias precisamente a su violencia -y a la cobardía de los demás- es por lo que todavía existen.

Sólo hay que dedicar unos minutos a leer a Sabino Arana, fundador del Partido Nacionalista Vasco, del que es digna cabeza visible el por el momento presunto delincuente Juan José Ibarretxe, para darnos cuenta de la "filosofía política" en que se basan los que insultan y agreden a los miembros del Foro de Ermua o a cualquiera que se desvíe de las ideas totalitarias nacionalistas vascas. Si leemos los escritos de Sabino Arana podremos entender con total y absoluta claridad los modos de actuar de Ibarretxe y sus seguidores, y los modos de actuar de sus colegas de la organización terrorista ETA-Batasuna. Toda esta gentuza es violenta porque nació de la mente enferma de un violento, pero la violencia no es lo que más caracteriza a estas hordas de hijos de puta, lo que realmente caracteriza a estos individuos es su cobardía. Puedo asegurar que jamás se hubieran atrevido siete nacionalistas a enfrentarse a decenas de demócratas, ni aún sabiendo que los demócratas nunca les agredirían, sin embargo estos siete valientes miembros del Foro de Ermua sí lo han hecho.

Éstos son vascos valientes y no la morralla que vota al PNV y a sus colegas de ETA-Batasuna.