Aproximadamente a las 17,00 horas del pasado sábado, día 26, el juez Garzón inició los interrogatorios de los 10 detenidos del comando Vizcaya de ETA, que no concluyeron hasta la madrugada de ayer, domingo. En dichos interrogatorios se ha puesto de manifiesto con toda claridad que el jefe del comando, Arkaitz Goikoetxea Basabe, recibía órdenes directas de Garikoitz Aspiazu Rubina "Txeroki" para realizar los atentados, y que el nombre que ETA había dado a este grupo ahora desarticulado era "Askatasun Haizea".

Tras los interrogatorios, el juez ha decidido meter en prisión a todos excepto a Libe Agirre Mazaga, que fue detenida en Fuengirola (Málaga), y a Inge Urrutia, que es la última de las detenidas en Guecho (Vizcaya). Tampoco ha ingresado en prisión Adur Aristegui Aragón, detenido en Elorrio (Vizcaya), si bien a este último le ha impuesto una fianza de doce mil euros. (Pulse para ver el Auto del juez Garzón, en él están todos los detalles)

En los interrogatorios se ha descubierto que, aparte de los plantes de ETA para matar al concejal socialista de Eibar, Benjamín Atutxa y al juez Grande Marlaska, el comando Vizcaya también había planeado el asesinato del actual senador del Partido Popular, Ramón Rabanera Rivacoba, que antes fue Diputado General de Álava, e igualmente tenían previsto el ataque con bombas a algunas sedes del Partido Popular y del PSOE en el País Vasco, así como a varias comisarías de la Ertzaintza, al cuartel de la Guardia Civil de Burgos, al museo del Ejército de la misma ciudad, a empresas concesionarias para la construcción del AVE en el País Vasco y a distintos hoteles y centros comerciales de zonas turísticas de España, preferentemente de Andalucía.

Precisamente para facilitar los atentados de los nacionalistas vascos de ETA contra los andaluces, Garikoitz Aspiazu "Txeroki" había encargado a Arkaitz Goikoetxea y a su colega, Jurdan Martitegi Lizaso, "Arlas" (actualmente huido), que preparasen una base en el sur de Portugal para ocultarse después de poner las bombas o de realizar los asesinatos, así como para esconder las armas y explosivos.

Con este comando de ETA, aparte de los detenidos, también han colaborado Aitzol Iriondo, Aitor Arteche Rodríguez y Asier Borrero Toribio, los cuales, como Jurdan Martitegi, están igualmente en busca y captura.

Concretamente Arkaitz Goikoetxea y Asier Borrero tenían una cita en Granada para el próximo día 15 de agosto, que tenía como fin recibir instrucciones para iniciar los atentados contra lugares de ocio en Andalucía, y lo cierto es que todas estas informaciones apuntan a que la Guardia Civil, con esta actuación, muy probablemente haya conseguido salvar algunas vidas de inocentes en el sur de España y evitar numerosos daños a negocios y bienes de muchos andaluces.

El contenido del zulo hallado en Guecho tenía una bomba dispuesta para ser utilizada

La Guardia Civil ha ofrecido imágenes del contenido del zulo descubierto en Guecho el pasado día 25, y aparte de los kilos de explosivos y otros efectos hallados, también había una bomba que ya estaba preparada para ser activada.

La bomba estaba en el interior de una olla, y ya disponía del detonador y de todo lo necesario para hacerla explotar.

Por las informaciones que los propios detenidos del comando Vizcaya han ido aportando, es muy probable que esta bomba fuese la que pensaban utilizar contra una patrulla de la Ertzaintza en el Puerto Viejo del barrio de Algorta, en Guecho, durante las próximas fiestas patronales de la localidad, aunque, por suerte para los ertzainas que ese día les tocase ir de servicio, la Guardia Civil ha desbaratado los planes de estos descerebrados "hijos" de Sabino Arana.

No sé el tiempo que le queda a ETA para dejar de existir pero, sea lo que sea, lo cierto es que es evidente que sus asesinos lo han hecho todo para demostrarnos con completa claridad que son la consecuencia de la locura de un hijo de la gran puta racista al que con gran fervor han honrado, honran y parece ser que seguirán honrando absolutamente todos los nacionalistas vascos.

Lo triste es que es posible que alguno de los ertzainas que podría haber muerto en ese atentado quizá vote a ese mismo Partido Nacionalista Vasco que inventó un loco fascista y del que salió la propia ETA, esa ETA que, a base de cobardes crímenes, está poniendo el más merecido colofón a una patética historia iniciada hace un siglo por un racista violento y de la que todos los vascos acabarán avergonzándose.